sábado, 9 de enero de 2010

DEJASTE TU SANGRE



Dejaste tu sangre
en la atrevida travesía
que hiciste por la ruta
de mis pétalos inocentes.

Dejaste tu sangre
en las albas puntadas de mis días
y en las claras noches de mi piel
todavía siento el aleteo de tus besos.

En las deshonestas puntadas
que se ahogan en mi olvido
y en ese mar que se recicla
cuando te miro.

Pero tú, llevas mi sangre
en el jardín trasparente de tus sueños
y en el licuado sexo que te queda
la soledad te arrincona y te consuela.


OASIS

2 comentarios:

  1. Las huellas son lo único que queda cuando se va el amor. Te quedo muy lindo, un beso y un abrazo.

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  2. Después del amor queda el recuerdo como una huella indeleble en el horizonte nuevo del mañana.

    Saludos

    Juan Carlos.

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