martes, 30 de junio de 2009
SOLEDAD INCONFESA
Entre oleaje de diáfanas espumas
por el frescor de las brisas matutinas
tu recuerdo llega entre olas asesinas
y vive preso en mi, como lejana bruma.
Tus brazos extendidos son como mantos
arropan ,conquistan mis rumbos inciertos
me acarician en el nublado concierto
se vuelve rocío mi dolor, mi llanto.
Siento tu dolor, tu tristeza profunda
fantasía, quimera, silencio lejano,
el aire trasmite el roce de tu mano,
tu mirada oculta, esperanza fecunda.
Todo me habla de ti, en mi muda amargura,
agita mis fibras en dulce promesa
el mapa celestial de fondo turqueza
sostiene mi soledad, aun inconfesa.
OASIS
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Este poema es de una sensibilidad que arrebata,Nimia.Una delicia.Ya te he enlazado a mis blogs.Soy Fedra.
ResponderEliminarUn abrazo